La vida en pareja es la alternativa mayoritariamente elegida por las personas adultas. Esta preferencia de tipo personal viene además avalada por las considerables ventajas identificadas, en especial en el ámbito de la salud y de la integración social, para esa forma de vida frente a la vida en solitario.
Sin embargo, la forma en que se lleva a cabo esta vida en pareja está en constante transformación, tratando de adaptarse a las propias condiciones cambiantes de la sociedad. De forma que la vida en pareja actual tiene poco que ver con la vida en pareja de épocas anteriores.
Las personas viven en pareja mientras estiman que obtienen más beneficios dentro de ésta que fuera, pero si la realidad comienza a demostrar lo contrario o si la percepción propia de la vida en pareja señala lo contrario, es lógico plantearse si no será mejor separarse.